Chuletón de Vaca Madurada/ Dry Aged + 30 días. 1 - 1.2 kg

La pieza estrella de nuestro Mercado: auténtica carne de vaca madurada en nuestras propias instalaciones; de nuestra casa a tu casa.

La maduración de carne en seco o dry aged es un proceso de añejamiento progresivo al que se somete la carne en ambientes determinados de temperatura, ventilación y humedad controladas durante un período de tiempo. Este proceso da lugar a ciertos cambios que se manifiestan directamente en las características organolépticas de la carne: concentra más aroma; el sabor se intensifica; se vuelve más tierna, más jugosa y con una textura increíble al cocinado. El chuletón, además, es una carne que, al estar pegada a la costilla, presenta una mayor infiltración de grasa respecto a otras piezas.

A nuestras instalaciones de Nicolás y Valero llegan los chuleteros de vaca europea que destinamos para añejar en nuestra cámara de maduración. Somos exigentes con la calidad de nuestros productos por lo que datamos la entrada de los chuleteros para controlar en qué día del proceso, nuestra carne está lista para su manipulado.

Durante las semanas que la carne envejece, vigilamos los rangos de temperatura y de humedad, controlando que nuestros estándares de calidad se cumplen. Pasados más de 30 días, nos aseguramos que ya está lista para su porcionado.

Nuestros carniceros limpian y preparan el chuletero para que solo queden las partes más nobles y de mayor aprovechamiento al cocinado. Fileteamos cada chuletón con cuidado, guardando las proporciones estándares del producto final, y limpiamos la carne con esmero antes de continuar. Envasada al vacío, nos aseguramos que cada chuletón conserva todas sus propiedades sin que sufra alteraciones organolépticas.

Posteriormente, los ultracongelamos para que puedas disfrutar de ellas hoy mismo, mañana o cuando tú quieras, con solo tener que conservarlas Bajo Cero.

Te recomendamos descongelar la carne en la nevera entre 6 y 7 horas antes de su consumo. Minutos antes de cocinarla, saca el chuletón de su bolsa y déjalo a temperatura ambiente hasta que alcance unos 25º C aproximadamente.

Para consumirla, te damos ciertos consejos en función de dónde la vayas a cocinar:
-    A la brasa:
-    Coloca la parrilla a 30 centímetros de las brasas. Déjala que se caliente y cuando lo esté, deposita la carne todavía sin sal.
-    Pasados unos minutos, dale la vuelta pero siempre teniendo cuidado de no perder su jugo.
-    Si te es posible, baja las parrillas más cerca del fuego, así podrás sellar la carne externamente y caramelizar su exterior, controlando el punto de cocción interno de la carne.
-    Retira la carne y añade sal en escamas por encima.
-    A la plancha/ sartén:
-    Pon a calentar bien la sartén o la plancha. Cuando lo esté, deposita la carne por encima y déjala unos minutos.
-    Cuando haya obtenido un color pronunciado, es hora de poder darle la vuelta y dejarla a fuego intenso hasta que alcance el punto de cocción deseado. Vigila siempre que quede hecha pero tierna por dentro llevando cuidado de no pasarla.
-    Retira la carne y añade sal en escamas por encima.

Conservar congelado. Una vez descongelado, no volver a congelar.